Por qué los turistas van a Marruecos
Por qué los turistas van a Marruecos, viajar a Marruecos es descubrir una de las verdaderas joyas del Norte de África. Es una tierra de gran importancia histórica y cultural, de infinita diversidad y constantes sorpresas, de grandeza imperial islámica y elegancia de la vieja Europa. Marruecos es un país donde pasado y presente conviven en fascinante armonía. Descubrirá que es un país a la vez encantadoramente exótico y reconfortantemente familiar.
Viajar a Marruecos por el propio destino
La cultura marroquí es una mezcla perfecta de influencias africanas, árabes (o moriscas) y europeas. Naturalmente, las dos lenguas más comunes en Marruecos son el árabe y el francés (el español también es relativamente común en el norte). Esta influencia europea se deja sentir sobre todo en las grandes ciudades, como Casablanca, Fez y Marrakech, donde encontrará grandiosos palacios islámicos y galerías de arte de estilo parisino. Si desea conocer un destino rico en cultura e historia, Marruecos le encantará.
Viajar a Marruecos para ver y hacer cosas
Simplemente pasear por las ciudades de Marruecos, disfrutar de la deliciosa comida local y empaparse de la gran y variada arquitectura puede ser muy gratificante.
Hay un sinfín de cosas que hacer en Marruecos, desde ir de compras hasta hacer surf, pasando por todo lo demás. De hecho, personas de todas las edades encontrarán mucho de lo que disfrutar en los vastos desiertos marroquíes o en sus sinuosas calles rústicas.
¿Desea un viaje cultural más pausado por Marruecos? Entonces le encantarán los monumentos históricos, museos y palacios repartidos por todo el país. Le recomendamos visitar la hermosa catedral blanca de Casablanca y la gran mezquita de Hassan II, la mayor de África. Desde Fez podrá visitar las fascinantes y bien conservadas ruinas de la ciudad romana de Volubilis, una de las más importantes de la región en su época.
La ciudad azul de Chefchaouen
Es posible que haya visto fotos de la ciudad azul de Chefchaouen , situada en el noroeste del país, cerca del enclave autónomo español de Ceuta. Los hermosos edificios azules de Chefchaouen le dan un aspecto único en el mundo y merece la pena visitarla cuando se viaja a Marruecos.